Hay kilos que provienen del alma, las tristezas, el malestar, la rabia, todas pesan, si, pero también PASAN! Es necesario cuidar la mente, no alojar estos lastres mas tiempo de lo necesario, de otra forma la báscula interna pondrá en evidencia el peso de las emociones negativas, y se hará parte de un circulo vicioso. Las emociones son como las visitas "hay que dejarlas ir y venir" solo aquellas que nos hacen sentir plenos, que nos impulsan y nos llenan, se reciben con emoción y se atienden con gusto y dicha. Presta atención a tu báscula, encuentra su "cero", y conscientemente decide desechar o conservar aquello que aligere el peso en tu báscula.
Conviértete en el guardián de tu báscula!
