Cosas cotidianas pero tan maravillosas, como poder respirar por los propios medios, poder caminar, poder ver, poder amar y ser amado, poder vivir en familia momentos inmemorables, poder disfrutar de un día de sol y deleitarse con una noche de luna. LA SENCILLEZ DE LA VIDA; este valor asociado a la humildad, realmente las "PEQUEÑAS" cosas son las que alimentan el espíritu, a diferencia de lo que vende la sociedad de consumo, la cual nos dice que la felicidad esta en el tener. La cultura de hoy parece que quiere hacernos creer que valemos por nuestra ropa, por nuestros autos, por estar a la moda... Pero precisamente toda esa cultura es la base del gran vacío interior que comienza a caracterizarnos ... La Vida es frágil y vulnerable, puede dar un giro inesperado en cualquier momento y sin previo aviso "Todos sabían lo que tenían pero nunca pensaron que podían perderlo" cuantas veces no hemos oído esto repetido, por eso, vale la pena echar un vistazo a las cosas sencillas que a diario ocurren y encontrar en ellas el sentido que merecen. Un Brindis por la VIDA, por los momentos y detalles que marcan la diferencia!
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